jueves, 30 de diciembre de 2010

Honrando a don José de San Martín

Acabo de ver un documental sobre los últimos años de San Martín. Un tipazo, San Martín. Dispuesto a dar su vida por defender la patria, que no es otra cosa que la Casa Grande, nunca quiso levantar las armas en contra de sus propios compatriotas, que no son otra cosa que los propios hemanos. Por ello nunca volvió a pìsar suelo argentino. El deseo de poder no lo sedujo, no fue su estilo imponerse por la fuerza. Les comparto este poema que se le dedicara, y que también es para cada uno de nosotros. Y con esto, mi deseo de un buen año por llegar.

FLORENCIO BALCARCE
(...)
La fama en tierra ajenas

me aclamó noble y bizarro;
pero ya, ¿qué soy? apenas
la ceniza de un cigarro.

Por la Patria fui soldado
y seguí nuestras banderas
hasta el campo ensangrentado
de las altas cordilleras.

Aún mi huella está grabada
en la tumba de Pizarro.
Pero, ¿qué es la gloria? nada;
es el humo de un cigarro.

¿Qué me dejan de sus huellas
la grandeza y los honores?
Por la paz hondas querellas,
los abrojos por las flores.

La Patria al que ha perecido
desprecia como un guijarro...
Como yo arrojo y olvido
el pucho de mi cigarro.

Las horas vivid sencillas
sin correr tras la tormenta;
no dobléis vuestras rodillas
sino al Dios que nos alienta.

No habita la paz más casa
que el rancho de paja y barro;
gozadla, que todo pasa
y el hombre, como un cigarro.

 

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Dormir con Mamá

Juanito tiene cinco años y lo que más ama en la vida es a su mamá. Le estorba su padre, sino fuera por él, la tendría para él solito. Un día papi y mami se han peleado. Mamá se lleva a Juanito a dormir con ella, mientras papá duerme en el sofá. ¡Oh, que alegría! Se le cumplió el sueño a Juanito.

Ahora, donde debería dormir un hombre y una mujer, duerme una mujer y “un hombrecito“.

jueves, 28 de octubre de 2010

Trauma y Traumitas

Creo que todos sabemos qué es un "Trauma": un suceso que ha marcado nuestra vida de forma negativa e intensa. Que cuando lo recordamos nos duele, nos choca, que en lo posible lo evitamos. Grandes traumas pueden provocar locura, traumas regulares pueden hacer nuestra vida infeliz, llena de amargura, tristeza o resentimiento. ¿Y los traumitas?... Veamos esto desde una perspectiva física.

Un trauma es como una herida abierta, con pus por dentro. A veces es notoria, a veces no. Le ponemos un esparadrapo encima y evitamos que nada la roce porque es una zona sensible. Generalmente cuando hay riesgo de que se cangrene (es decir, que se extienda al resto de nuestra vida y la destruya) nos vemos en la urgencia de buscar ayuda. Queremos ser curados, pero que no duela. Si lo que te afecta no es tan profundo u otros aspectos de tu vida están fuertes, y y quien te ayuda tiene la experticia, casi ni lo sentirás. Toma en cuenta que tiene que salir la pus, hay que lavar la herida y protegerla el tiempo que cicatriza (un tiempo que dá ganas de rascarnos, ¡el riesgo de volver atrás!). Pero acá no hemos terminado.

Con ayuda profesional o sin ella, mucho de lo que nos ha afectado lo hemos superado. El sostén de nuestros padres, el apoyo de un amigo, el aliento de alguien a quien admiramos o los propios recursos que nos hemos generado a largo de nuestra vida, nos han permitido cicatrizar nuestras heridas emocionales. Y sin embargo cada vez que vemos la marca, la cicatriz o alguien nos la señala, nuestro semblante se puede ensombrecer y nuestro corazón comprimir. A esto yo le llamo los traumitas. Podemos vivir con ellos, pero nos roban vitalidad, nos roban alegría, y muy sutilmente, impiden que nuestras relaciones sean mucho mejores. Al proceso de superar los traumitas se le ha llamado purificación, limpieza mental, limpiar las memorias, liberación emocional, desapego, etc. Y básicamente, consiste en lograr que la emoción (negativa) se despegue del pensamiento (recuerdo o expectativa), la perspectiva cambia y la tensión que quedaba se libera. La Meditación de la Atención Plena y EFT (y otros semejantes) son uno de los mejores recursos para lograrlo.

"Intenta sin esfuerzo, ir viviendo con la muerte, en un presente sin futuro" (Krishnamurti)

martes, 26 de octubre de 2010

YO NO SUEÑO

Con profunda convicción me respondió aquel hombre frente a mi. "Yo no sueño. Es más, estoy preocupado  porque esas gotas que me ha dado me están haciendo soñar"(se estaba refiriendo a las esencias florales que le había indicado).
Soñar, para muchos, es sinónimo de que la mente no está descansando, señal de malos presagios o, lo que es peor, algo raro e innecesario. Veamos si soñar es tan raro...

Todas las noches, al irnos a dormir, se activa un proceso que consta de tres momentos principales: sueño ligero, en la que estamos medio dormidos, medio despiertos. Es esa etapa en que, si estamos frente al televisor, "soñaremos" con una urraca parlanchina, por ejemplo (cualquier coincidencia es pura casualidad). Si continuamos sin ser despertados, pasaremos a un segundo momento, en la que se entra en un profundo descanso, al punto que si intentan despertarnos, será muy difícil hacerlo, y finalmente un tercer momento en el que realmente soñamos.  Y este ciclo se repite de cuatro a cinco veces ¡cada noche! Lo que significa que todos soñamos, y varias veces.

El que muchas personas no lo recuerden o lo olviden pronto más bien tiene que ver con dos razones (las más frecuentes): el ritmo acelerado de la vida nos hace entrar rápidamente en las preocupaciones del día y olvidamos lo que soñamos o, no valoramos, consideramos de poca importancia, el mensaje que guardan nuestros sueños. En ambos casos puede estar reflejándose un interés bajo por conocerse a sí mismo. Por ello, aludiendo al comentario inicial sobre las esencias florales, al utilizarlas se activa una mayor conciencia de sí mismo, necesaria para una más completa y profunda curación, y más fácilmente se pueden recordar (y a veces comprender) los sueños.

Si usted es de los que no los recuerda, pruebe decirse esto al momento de acostarse: "Mañana recordaré mis sueños". Y disponga de un tiempo para repasar lo soñado, escribir palabras clave que se lo recuerden ya entrado el día, y alguien con quien conversar para acercarse a su significado.

"Soñar no cuesta nada... sueña en Grande"

domingo, 24 de octubre de 2010

DETRAS DEL TOC (TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO)

Ella no paraba de pedir, de suplicar: "¿puedes volver a hacer lo que has hecho?, ¿puedes volver a repetir lo que has dicho?", o ella misma repetía lo que acababa de decirle. No podía mantenerse sentada, y parecía que quería salir de allí. Cuando podía evitar la irrupción de la obsesión (aquello que dominaba sus pensamientos) su discurso hablaba de un chico que le gustaba, con el que quería tener sexo. Un comentario nada raro en un adulto, pero rarísimo de oír en un adolescente, generalmente reservado de sus sentimientos e impulsos.

¿QUE hay detrás del TOC (en este caso)? ¿Por qué se rompen los límites del recato?

El TOC pone en evidencia un mecanismo de protección frente a la avalancha de sensaciones intolerables. La persona ha tenido que separar su cuerpo (sensación y emoción) de su cabeza (pensamiento), para tolerar dicha avalancha. Se suele tornar muy "racional", lo investiga todo, a todo le busca la lógica. Pero siente poco, su pensamiento se vuelve árido, su vida es poco vital (depresión), y si le preguntamos ¿cómo te sientes?, frecuentemente responden: "normal" (no saben si bien o mal). Como casi no sienten, pueden mencionar temas sexuales con facilidad, pero no hay emoción en ello (para la mayoría hablar de sexo involucra pudor, verguenza, culpa, emociones de regular intensidad). La Obsesión o la Compulsión se encargan de mantener distraída la persona. Distraída de la experiencia matriz, de aquello que interpreta como intolerable, el secreto inconfesable... Vivencias que raramente pueden ser evocadas concientemente porque suelen corresponder a etapas en que aún no se había desarrollado ni la razón ni el habla. El abuso sexual, el incesto real o imaginado, la sensación de la muerte próxima (si es que pensaron o intentaron abortarnos), son algunas de estas vivencias.

UN hombre que superó gran parte de su TOC lo resumió así: "Estoy mejor gracias a que he podido aceptar que hay aspectos oscuros, sucios, en mi, y que no me pertenecen del todo. Soy un ser humano imperfecto,y así me acepto."

jueves, 26 de agosto de 2010

Necesidad de Afecto

Un estudio revela que uno de cada tres británicos adultos duerme acompañado por su osito de peluche. Los encuestados confesaron que así se sienten menos estresados y el sueño profundo les llega mucho más rapidamente. Y en el 50% de los casos se trata de los 'Teddies' de su infancia. Además, un 25% de los hombres mayores de edad llevan consigo a sus ositos preferidos cuando se van de viaje de negocios.

La investigación se motivó por el hecho de que una gran parte de hombres y mujeres de negocios llamaban frenéticos a los hoteles donde se habían hospedado reclamando sus 'peluches' olvidados.


¿Adultos con ositos de peluche? Así es, la necesidad insatisfecha de afecto durante la infancia requiere de algo que la sustituya: el peluche es un juguete suave, tierno, que nos acompañaba en representación de mamá, al que abrazábamos cuando nos sentíamos solos o temerosos. Conservarlos en la adultez no le hace daño a nadie, pero es un buen motivo para reflexionar: ¿cuán adulto me siento? ¿cuán seguro? ¿cuánto amor y fuerza llevo de mis padres en mi interior, que no me hagan necesitar peluches, trapitos, o cosas por el estilo?

El Crecimiento no tiene fin...

lunes, 17 de mayo de 2010

Diagnóstico: "USTED NO TIENE NADA..."

Cuerpo y Mente suelen entenderse como cosas separadas, diferentes, incluso hasta opuestas. Hasta pueden llevarse al extremo absurdo, expresándose en una frase muy médica: "Usted no tiene NADA" -Pero, doctor, dice el paciente: "si yo siento esto, me duele aquello, cómo que no tengo nada". Y el hombre de blanco, muy convencido de sus conocimientos insistirá: "Sus análisis indican que usted NO TIENE NADA".

Detengámonos un ratito y analicemos la conversación anterior:
  • Si yo como paciente siento algo, me duele algo, eso quiere decir que TENGO ALGO.
  • Los análisis los da una máquina, que puede ser muy bonita, muy moderna, pero sigue siendo máquina. ¿Dónde quedaron los médicos que me decían "saque la lengua", que me pedían toser mientras oían mi pecho con el estetoscopio, los que apuntaban con un foquito mientras miraban mis ojos?
  • Y si aparentemente no tengo nada, ¿no sería oportuno descartar alguna dificultad emocional?
Ante unos examenes que no indican nada se tiene que hacer dos cosas: Pedir una segunda opinión o sospechar que el problema AUN está en el plano mental, que aun no se ha consolidado como enfermedad orgánica, que lo que siente el paciente es un conjunto de reacciones que el cuerpo usa para avisar que el nivel de estrés se está elevando demasiado.

Hace mucho que está claro que la gastritis, la hipertensión y el asma, por poner unos ejemplos, guardan estrecha relación con las emociones. Pero también síntomas como falta de aire, dolores de cabeza, hormigueo, están reflejando malestares emocionales. Así que la próxima vez que oiga decir "Usted no tiene nada", piense en su nivel de estrés, y en como bajarlo. Y si no puede sólo, busque ayuda psicológica.

El cuerpo siempre está hablando, por ello:


"aquel al que no se le escucha
tiene más bien tendencia a gritar que a callarse"
- Ginger y Ginger (1993) - 

jueves, 13 de mayo de 2010

Mala Suerte, Buena Suerte ¿Quién Sabe?

"Una historia china habla de un anciano labrador que tenía un viejo caballo para cultivar sus campos. Un día, el caballo escapó a las montañas. Cuando los vecinos del anciano labrador se acercaban para condolerse con él y lamentar su desgracia, el labrador les replicó: '¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe?' Una semana después, el caballo volvió de las montañas trayendo consigo una manada de caballos salvajes. Entonces los vecinos felicitaron al labrador por su buena suerte. Este les respondió: '¿Buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe?'

Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de aquellos caballos salvajes, cayó y se rompió una pierna. Todo el mundo consideró esto como una desgracia. No así el labrador, quien se limitó a decir: '¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe?' Unas semanas más tarde, el ejército entró en el poblado y fueron reclutados todos los jóvenes que se encontraban en buenas condiciones. Cuando vieron al hijo del labrador con la pierna rota, lo dejaron tranquilo. ¿Había sido buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe? Todo lo que a primera vista parece un contratiempo puede ser un disfraz del bien. Y lo que parece bueno a primera vista puede ser realmente dañoso. Así pues, será postura sabia que dejemos a Dios decidir lo que es buena suerte y mala, y le agradezcamos que todas las cosas se conviertan en bien para los que le aman."

Anthony de Mello - Sadhana

sábado, 8 de mayo de 2010

Para ti, Negrita

YouTube - Las manos de mi madre

Mater nostra

Dicen que muchos bebés lo primero que dicen es Pá! Hay que mirar las caras de sus abnegadas madres entre la sorpresa y el desencanto de no haber oído un Má! Y sin embargo esto sugiere un verdadero motivo de orgullo para esa mamá. ¿No le ha pasado que cuando le han preguntado su número telefónico no lo ha recordado y a respondido -a modo de disculpa- "es que como yo no me llamo a mi mismo"? Pues como que con los pequeños pasa lo mismo: mamá es parte de ellos.

Mamá es calor, es arrullo, es el límite que me contiene, es el espejo que me hace saber que existo, es una gran teta que sacia mi hambre, mi sed y mis angustias. Ella es Yo y Yo soy Ella.

¿Cómo llamarla si está conmigo, si soy yo mismo?

A esto le llamamos Fusión Madre-Bebé, de la que poco a poco nos vamos desprendiendo mutuamente, saliendo en busca de ese Pá! , dejando la teta, yendo a la escuela, haciendo amigos, formando parejas, yéndonos de casa, dándole su lugar a nuestro consorte. Si para nosotros, hijos, es un proceso a veces díficil, para nuestra madre lo es tanto o más, porque ella nos llevó en su barriga 9 largos meses, nos tuvo en sus brazos chiquitos y frágiles, cuidó de nosotros más grandes pero dependientes, y nos vió adentrarnos en el mundo, aunque para ella seguíamos, y siempre seguiremos, siendo "su pequeño, su pequeña".

No importa donde estés, mamá, aquí, en mi corazón, tu siempre serás la grande y yo, tu pequeño.

FELIZ VIDA, MAMA

jueves, 6 de mayo de 2010

CUANDO EL CORAZON SANGRA

Uno de los grandes dolores que sufre el ser humano es la pérdida del amor. Hemos hallado a alguien “perfecto”, que nos gusta. Le entregamos nuestros sentimientos, nuestras ilusiones. Y un buen día… zas! la relación termina. Dice que ya no nos quiere, que “necesita tiempo para pensarlo”, o simplemente desaparece. Y el mundo se nos viene encima.

Es entonces cuando el corazón sangra No, no es poesía, realmente sentimos que nos han partido el corazón y el alma. Nos sentimos vacíos, que nos han quitado “algo”. Es natural llorar en estas circunstancias. Pero podemos tragarnos nuestras lágrimas, y luego se transformarán en enfermedades. O quedarnos en la pena, alimentando una depresión que lentamente se apodera de nosotros. Y un buen día nos decimos: “Voy a pasar la página”, y hacemos como que nos olvidamos y seguimos con la vida. Pero dentro nuestro corazón sigue sangrando…


Terminar una relación implica un luto, un duelo, que es un proceso de cinco aspectos:
  • Negación (“esto no me está pasando”);
  • Depresión (dejo de negar la realidad y eso me llena de tristeza);
  • Rabia (que permite tomar distancia de la pérdida. El peligro es quedarse en esta etapa y vivir con rencor);
  • Cicatrización (se recupera la Autoestima. Estamos dispuestos a dejar marchar al otro); y
  • Aceptación (reconocemos nuestra parte de responsabilidad. Valoramos lo bueno que nos aportó la relación y nos llevamos lo aprendido. Ya no hay dolor.

    El tiempo no es suficiente para curar las heridas emocionales. Podemos haber establecido alguna nueva relación, habernos casado, haber pasado meses o años, y sin embargo seguir anclados en el pasado, impidiéndonos nuestra plena felicidad ahora.

La Psicoterapia potenciada con las Esencias Florales (Flores de Bach, de California, etc.) puede resolver y ayudar a superar asuntos pendientes inclusive de muchos años, más rápidamente. Por ejemplo la esencia Holly nos ayuda a manejar la rabia y los celos; Honeysuckle a poder dejar atrás el pasado, con aceptación; Gentian nos devuelve el ánimo perdido; Bleeding Heart (Corazón Sangrante) nos dará la capacidad de cortar los lazos de una relación que ya fue. ¡Y nuestro corazón será otra vez libre para Amar!